Podría decirles que soy fotógrafo, arquitecto de profesión, artista 3D, un ávido contador de historias, pero en el corazón, soy ante todo un simple viajero pasando por la vida; un nómada, un aventurero deambulando por el mundo en busca de comprender la vida y la existencia, tratando de encontrarle sentido a todo. Sediento de aprendizaje, he pasado una buena parte de los últimos 25 años de mi vida, dedicado al arte de viajar. A pesar de que puedo haber nacido en Argentina, y ahí es donde están mis raíces, ahora soy claramente un ciudadano hecho de pedacitos de miles de otros lugares diferentes.
He viajado en 91 países y cientos, si no miles de ciudades, pueblos y aldeas. Cada uno de ellos ha dejado algo en mí que, de una forma u otra, ha contribuido a dar forma a la persona que soy hoy. Esto sigue siendo un proceso en marcha a medida que continúo viajando por el mundo para seguir aprendiendo, evolucionando, transformándome e incorporando nuevos aspectos que aprendo en el camino.
A través de mis experiencias he confirmado lo que algunos solo pueden leer en libros y asumir como real, mientras que otros pueden optar por ignorarlo por completo. En esencia, no importa cuán diferentes sean nuestras culturas y qué tan alejadas puedan parecer a primera vista, bajo la superficie, todos buscamos la misma meta. Todos tenemos las mismas necesidades básicas. Todos compartimos los mismos instintos: reímos y lloramos, sonreímos y miramos mal, nos enamoramos y desenamoramos. Sin embargo, lo sorprendente es descubrir cuán esencialmente similares somos a la hora de crear cualquiera de estas emociones y reaccionar ante ellas. En última instancia, la meta en común es la felicidad y evitar el sufrimiento.
He utilizado todos los medios de transporte para atravesar este mundo y todos me han aportado diferentes visiones del mismo. He caminado, corrido, montado, conducido, volado o hecho auto-stop. He tomado autobuses, camiones, trenes, aviones, rickshaws, motos, transbordadores, ferrys, barcos, canoas, burros, caballos, elefantes y camellos. Pero desde 2006, he elegido una bicicleta como mi medio favorito de transporte independiente.